Jess Services en Valladolid

Sobre la fundadora

Recuerdo pasarme todos los domingos haciendo limpieza general en casa de mi abuela, las limpiezas que se hacen ahora una vez al mes, o una vez al año… Limpiar muebles por dentro sacando todo, lavar cortinas, limpiar lámparas de cristales uno a uno, azulejos, carriles de ventanas, etc… Y entre semana siempre había que pasar el polvo, barrer, limpiar el baño, todo organizándonos entre las mujeres que vivíamos en casa. Era algo divertido y cotidiano. Mi abuela era una apasionada y extremista de la limpieza y su madre también lo era. Así se lo inculcó a mi madre, a mis tías, y con ello ha pasado de generación en generación.


 

Recuerdo la frase de mi abuela en el día a día “No tendremos un duro, pero la casa está como los chorros del oro”  Supongo que, como muchas mujeres de su casa de hace más 50 años, que la prioridad número 1 era tener su casa extremadamente limpia, hacer comidas, planchas, y cuidar de sus hijos y nietos, si cabía.


Empecé joven ayudando a mi madre a limpiar casas particulares para sacarme una propina extra y con solo 18 años ya tenía mis propias casas. Limpiar para mí era para mi algo fácil, automático y que tenía sentido, pues me hacía sentir bien.

foto de ciudad de noche

Después pasé por multitud de empresas de limpieza, aprendiendo habilidades nuevas de otras compañeras veteranas, no estando también conforme muchas veces en las actuaciones de otras, y desarrollando mi carrera profesional el sector. Me he pasado una década trabajando en hoteles de 4 y 5 estrellas, dado a mi determinación con una limpieza extremadamente detallista y perfecta, y allí adquirí ventajas como control de tiempos en tareas, perfeccionamiento de pequeños detalles, adaptación a trabajos intensos y muchas otras cualidades que un personal de limpieza profesional debe adquirir para sacar un buen trabajo adelante.



Después de transcender la maldita creencia “Estudiad o acabareis fregando escaleras” tan escuchada en casa de mi abuela, que tanto daño ha hecho en personas que nos dedicamos a limpiar, sintiéndonos menos que profesiones de abogadas o arquitectas, me enfrente a la aceptación de que este era mi forma de servir en este mundo, y he podido crear mi propio negocio de limpieza, algo que realizo con pasión, destreza, detalle, profesionalismo y autenticidad y con la mayor ilusión de poner mis habilidades al servicio del mundo.



Apasionada desde pequeña también por la naturaleza y desde mi juventud por la inversión inmobiliaria, realice diversos estudios en ambos sectores, tomando experiencia con ello para poder ofrecer servicios con dedicación, confianza y profesionalidad. Cuento para ello también con profesionales de mi total confianza para ofrecer toda la gama de servicio que pongo a disposición desde Jess Services.


Una mujer está limpiando una ventana con un paño y spray.

descubre nuestros servicios de limpieza del hogar